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"EL LLAMADO A SALIR DE BABILONIA"
Shalom queridos amigos y hermanos,
Recientemente recibí un mensaje escrito por alguien de nombre Rocío Salazar, de parte de un siervo en España llamado Edgar. Quisiera compartirlo con Ustedes ya que me gustó mucho la forma condensada en que esta sierva Rocío redactó el mensaje sobre la necesidad del Pueblo de salir de su estado espiritual Laodiceano (tibio, complaciente y engañado) y de BABILONIA, y que formen parte del REMANENTE FIEL de la Kejilah genuina de Yahweh ANTES de que el propio Yahweh los juzgue como miembros de una ramera e impostora iglesia que pese a las advertencias no se quiso arrepentir, y que las plagas del Gran Dia de la Ira de Yahweh les caigan encima.
(Y eso es justamente lo que va a pasar con la mitad de ese pueblo "llamado a salir" y que no quiso responder al futuro mensaje y advertencia final de Yahweh por boca de los Dos Testigos. De hecho, Yahweh ya está advirtiendo a los Suyos mediante la genuina Kejilah que sigue fielmente a Yahushua y que guarda los mandamientos.)
Amados, noten la forma clara, concisa y poco pretenciosa que Rocío utiliza cuando escribe. Lo compartimos porque creemos que un mensaje de este estilo sirve de ejemplo para muchas mujeres---y hombres también---que quieren escribir o abundar en algún pasaje de la Escritura Kodesh.
“Y oí otra voz del cielo que decía: Salid de ella pueblo mío, para que no seáis participes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas” (Apocalipsis 18:4)
"El Libro de Apocalipsis comunica una fuerte advertencia a la Congregación del Mesías Yahshua. (Por congregación entiéndase Asamblea, Kejilah o Cuerpo de Yahshua). Habla de la condición presente y del destino futuro del pueblo que llena las bancas de iglesias y dicen ser del Mesías. Habla de lo que está mal con la iglesia cristiana de los últimos días y le ruega que se arrepienta de su pecado y de su malvado camino. Gráficamente muestra a la iglesia como una prostituta y le ruega a sus miembros: “Salid de ella pueblo mío.”
“Oh Yahweh, fortaleza mía y fuerza mía, y refugio mío en el tiempo de la aflicción, a ti vendrán naciones desde los extremos de la tierra, y dirán: Ciertamente mentira poseyeron nuestros padres, vanidad, y no hay en ellos provecho” – Jeremías 16:19. Esas mentiras de las que habla Jeremías han pasado de generación en generación convirtiéndose en un conjunto de creencias que no se parecen en nada a lo que enseñan las Escrituras.
Nos han enseñado que Apocalipsis habla sobre lo que pasará en el futuro después que la (impostora) iglesia (cristiana) haya sido arrebatada al cielo en un supuesto rapto pre-tribulación. Nos han enseñado que los dolorosos eventos de Apocalipsis no afectarán a la (genuina) iglesia (Kejilah o Cuerpo) del Mesías. Nos han dicho que esas cosas espantosas serán exclusivamente para los incrédulos después de que los creyentes hayan partido.
Pero nada de eso es cierto. El libro de Apocalipsis ha sido dado a los “mensajeros de la congregación” como una advertencia y un ruego a examinarse a sí misma y a arrepentirse para no ser recipiente de la ira final de Elojim. En los capítulos dos y tres, el Mesías Yahshua envía amonestaciones y advertencias a su pueblo porque no están obedeciendo su Palabra. Desde ahí hasta casi el final del libro, Elojim envía dificultades, calamidades y desastres a los habitantes de la tierra para hacer que Su pueblo y el resto de la humanidad se arrepienta.
Y al final del libro, justo antes de que la ira final de Yahweh sea derramada, muestra a la iglesia como una prostituta que no se quiere arrepentir de su prostitución y le ruega a los verdaderos creyentes:Salid de ella pueblo mío”. Y aquellos que rehúsen dejar las prácticas babilónicas serán juzgados."
Si todo esto le suena a Usted como chino, amado mío o amada, entonces le sugerimos que lea todos nuestros mensajes, uno a uno, que tratan acerca de la Kejilah, identidad de la Mujer Israel, los juicios y las resurreciones. Y antes de hacerlo, ore por sabiduría y obediencia, y ya Usted verá que Yahweh le abrirá su entendimiento para comprender todos estos importantes aspectos de Su maravillosa Verdad Kodesh.